El golf, un valor añadido para la comercialización de casas de lujo
Golf y lujo, lujo y golf. El orden de los factores no altera el producto pero la suma de ambos a promociones inmobiliarias sí que cambian, y mucho, algunos aspectos. Concretamente, la asociación entre el mundo del golf y los inmuebles de lujo hace que las casas más exclusivas incrementen su precio entre un 10 y un 20%.
Existen zonas en nuestro país especialmente proclives a esta asociación de lujo y golf, como es el caso de la Costa del Sol. En Marbella, lugar en el que se concentran algunas de las viviendas más majestuosas de toda la geografía española, existen importantísimos campos de golf, lugares de ensueño para practicar golf en Marbella, con sitios tan magníficos como el Club de Golf Aloha. Este y otros muchos serpentean todo el litoral andaluz.
Esta no es la única parte del país donde golf y casas de lujo van de la mano. Otro ejemplo muy evidente es Madrid. La comunidad cuenta con numerosos resorts de este tipo en La Moraleja, Ciudalcampo, Las Rozas o Puerta de Hierro. En estos casos, ser propietario de casas de lujo asociada a instalaciones para la práctica del golf puede costar en torno a 800.000 euros.
El caso más evidente se encuentra en la Costa del Sol. Desde Málaga a Sotogrande, en Cádiz, se pueden encontrar hasta 72 campos de golf y es en esta zona de la costa donde la oferta se multiplica y puede ir desde los 450.000 euros hasta 5,5 millones de euros. Es esta última zona, ya en el litoral gaditano, donde se concentran los inmuebles más costosos. Y es que Sotogrande es uno de los resorts más elitistas del sur de Europa. Hay en venta villas desde 250 metros construidos junto al campo de golf con una parcela que parte de 1.000 metros y cuyo precio arranca en 695.000 euros. Entre sus urbanizaciones destaca la de Las Cimas de Almenara y Ribiera del Marlín.
Rumbo a la isla de Mallorca encontramos otros paraísos. Así, próximo a Port d’Andratx se encuentra Gran Folies, con un estupendo campo de golf en sus inmediaciones, o Son Vida, otro paraíso para golfistas, ya que, además de sus tres campos de golf que suman 63 hoyos (Golf Son Vida, Golf Son Quint y Golf Son Muntaner), este complejo está a tiro de piedra de otros como Son Antem, Santa Ponsa, Son Termens y Son Gual.
Así podríamos seguir recorriendo toda la geografía española. Pero no es el momento. Lo que está claro es el matrimonio de éxito que conforman golf y casas de lujo y que seguramente está favoreciendo buena parte de la salida del stock que tiene el mercado inmobiliario.